El pacto vegano, por Esteban Guido
Entré a casa y estaba Eva llorando en el sillón. Nunca en todo este tiempo había visto a mi novia tan angustiada. Estaba abrazando un almohadón, tenía el maquillaje corrido y no podía hablar. Preocupado, le pregunté: – ¿Qué paso? – Estaba viendo un documental y … – siguió con[…]
Seguir leyendo